El Salón Real del hotel Alfonso XIII volvía a llenarse este fin de semana de volantes con "Cíclica", la nueva colección de la diseñadora Ángeles Verano que presentaba en solitario en un desfile lleno de amigos y momentos para el recuerdo.

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Antes de comenzar el carrusel de lunares, se entregaba el tradicional "Flamenca con Arte", un galardón que anualmente otorga la diseñadora como reconocimiento a la elegancia por lucir el traje regional andaluz. La nueva edición de este premio recaía este año en la cantante María del Monte, que según la modista "reúne méritos suficientes por su fuerte personalidad, su carácter, su gracia, su capacidad de trabajo y, sobre todo, por su arte".

La famosa intérprete de las sevillanas más cantadas recogía su reconocimiento con traje de flamenca en color azul klein con estampado floral, realizado expresamente por Ángeles para la ocasión y en el que destacaban las mangas de un delicado tul azul.

Y tras el premio se desvelaba el secreto, cincuenta trajes de flamenca desfilaban para presentar "Cíclica", una mezcla de tradición e innovación, una recopilación de los elementos que definen a Ángeles Verano y que la han llevado a coronarse como una de las diseñadoras más consagradas en este arte que es ya la moda flamenca.

Desde lunares con un marcado sabor andaluz hasta exquisitos estampados italianos, la nueva propuesta de la diseñadora gaditana es un clásico renovado, una declaración de intenciones para reafirmar su esencia flamenca pero sin perder las ansías de renovación y la intención de reinterpretarse a sí misma.

"La vida es cíclica y la moda también. Son estos ciclos los que nos moldean, nos hacen diferentes, nos obligan a tomar nuevas decisiones y nos retan a mantener nuestra esencia". Y así Ángeles Verano vuelve a apostar por la comodidad, la calidad de los tejidos y la sensualidad de la mujer andaluza con trajes donde el movimiento es el protagonista, vestidos que recorren las raíces más flamencas con faldas canasteras hasta las tendencias más urbanas con conjuntos de dos piezas rematados con fajines.

Un ramillete de trajes rojo pasión abrían boca en una pasarela que veía pasar desde delicados estampados florales pasando por lunares de mil colores hasta llegar a exquisitas gasas y tules. En definitiva, una explosión de sensualidad y estilo en todas su variantes para reafirmar que la elegancia y la exclusividad siguen siendo dos pilares fundamentales para la diseñadora.

La nota distintiva la ponían los mantones pintados a mano de Rocío Casado, los pendientes y peinas de Maleni Zambrano y el calzado de Nuria Cobo. Ángeles, aunque este año no presentará sus propuestas en SIMOF, llevará su colección a la Mercedes-Benz Pasarela Flamenca de Jerez con un desfile el día 8 de febrero.

Marina Rubalcaba