El eterno ganchillo de las abuelas se apodera este verano de las grandes firmas. Estas apuestan por una tendencia más allá del caftán de playa De la mesa camilla de las abuelas a las grandes pasarelas.
El crochet llega para quedarse. Y lo hace de todas las formas posibles; desde unos zapatos hasta un vestido, un abrigo o un bolso de fiesta. Será porque el estilo setentero sigue dando coletazos.
Lo cierto es que las prendas de ganchillo continúan dando mucho juego y, lo que el año pasado comenzó como una tendencia playera (a modo del caftán y vestidos boho), este año ha dado un giro de 180 grados de la mano de las firmas más exclusivas, que lo han convertido en un imprescindible de la temporada.
Sobre la pasarela, Gucci y Dolce and Gabanna fueron los más arriesgados. Así, la primera hizo una apuesta por el color con prendas que parecían sacadas del baúl de los recuerdos y, lo que en principio parecía una apuesta excéntrica, ha terminado convenciendo a más de una it girl.
La apuesta de Dolce and Gabanna es también colorista y alocada y ofrece desde trajes de chaqueta hasta bolsos y zapatos. Uno de los que han conseguido que el crochet se quite el halo de ñoño que lo ha acompañado en las últimas décadas ha sido Balmain, que con sus prendas caladas ha sabido aportar al ganchillo una sensualidad desconocida.
El crochet se combina este año casi con todo. Desde prendas de algodón hasta festones de plumas (como tan bien ha sabido demostrar DelPozo) o faldas de tul.
La alta costura se decanta, sobre todo, por los detalles de ganchillo a modo decorativo, casi siempre con aplicaciones, mientras que las firmas más comerciales, como Hilfiger, elabora prendas completas y le dedica casi íntegra su colección de playa, en la que hay sitio para vestidos, camisetas de tirantes y hasta bikinis.
También las firmas low cost como Zara, Pull & Bear o Mango se han rendido a la crochetmanía y dejan sitio en sus estanterías para estas prendas, sobre todo para las de colores vivos y de rayas.
Una vez que hayamos sucumbido a esta tendencia y tengamos las prendas de ganchillo en el armario, a la hora de escoger el outfit perfecto será mucho mejor aplicar la fórmula de menos es más que pecar en exceso.
Isabel Berea
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